Convalece, Job López Reyes, en EUA

Migrantes e Inquilinos, Beneficiados con su Testimonio Socialcristiano

 

José Agapito Salazar Ibarra, 301219.

Convalece, poco a poco, mi amigo Job López Reyes, promotor y cofundador de la primera Casa del Migrante (católica) en San José, California, EUA, y, allí mismo, (fue) coordinador de la campaña cívica que logró la regulación legal –herejía en el Imperio del dinero- de los alquileres de vivienda, cuyo libertinaje permitía abusos extremos de latifundistas urbanos o casa-renteros.

 

Job se encuentra en una clínica de San José, me dijo anoche –vía telefónica, lo cual  agradezco- su hija Liliana, quien aludió  exclusivamente a la salud de su padre. Ella está en la esperanza de que dentro de unas semanas puede salir del centro médico. Confiamos en la multiplicación de las cadenas de oración para pedir a Dios lo sane plenamente.

 

Durante los primeros días de noviembre, Job anduvo por acá. Vino a visitar a sus difuntos, a familiares y amigos. Invitó al Pbro. Oscar, misionero de la Congregación del Corazón de Jesús, filipino de origen, quien acaba de jubilarse. El, admiró las Joyas Coloniales de esta capital, de las que se fue cargado de fotos tomadas por él mismo.

 

El P. Oscar platicó que en las Filipinas hay una población llamada México, porque fueron mexicanos los pioneros en la integración de la Isla al mapa continental, hecho que cita Don José Vasconcelos en su Breve Historia de México.

 

Con ambos, Job y Oscar, varios ex-acejotaemeros compartimos la mesa en el restaurante La Victoria, entre otros: Juan Francisco Antúnez Benítez, Miguel Ángel Ortiz Gallegos, Jesús Rafael González Salas, José Valderrama Vela, Raúl Castañeda Romero –tesorero del periódico ADELANTE, del que Job fue el alma operativa, en el Diocesano-ACJM, de 1971- Juan Antonio Barrón Morales, José Agapito Salazar Ibarra…

 

Sin previo acuerdo, no hubo discusión política alguna, que hubiera sido interesante, pero habría alcanzado a tensionarse, dada la pluralidad política en el grupo que, sin embargo, ve más allá de lo que se pesa o se mide, o sea, es trascendente, y lleva por eje vital a Cristo y a Santa María de Guadalupe.

 

Nuestra familia, agradecida, se une de corazón a la petición al Padre Celestial, de que por el sacrificio de su Hijo Jesucristo, el Espíritu Santo fortalezca a Job y a su familia, y guíe a médicos y auxiliares, para que si es su santa voluntad, lo restablezca plenamente.