El saldo de este fin de semana para el sector restaurantero fue fatal, hubo empresarios formales obedientes y algunos desobedientes, pero se calcula que 450 restaurantes establecidos cerraron en acato a todas las medidas sanitarias, hubo mil 500 informales y puestos en la vía pública que abrieron sin medidas y sin freno, esto indudablemente no es un piso parejo y mantiene en la lona a la industria restaurantera.
Así lo denunció el presidente de la CANIRAC, Miguel Camacho Herrera, al hacer un recuento de las condiciones en que opera el sector bajo las restricciones que se mantienen en el semáforo rojo, cuyos puntos más dañinos han sido el cierre a las 7 de la tarde durante sábados y domingos, así como a las 10 de la noche entre semana y, desde luego, la falta de piso parejo.
Añadió que la lista de negocios cerrados de manera definitiva está aumentando, y eso es muy preocupante por la pérdida de empleos que significa, por lo cual se ven en la necesidad de hacer el planteamiento a la autoridad para que les permita al menos abrir de lunes a viernes hasta las 11 de la noche con venta de cervezas y bebidas preparadas, así como que los fines de semana se les permita operar por lo menos hasta las 10 de la noche.
Resaltó que en los restaurantes formales no se están dando los contagios y hay un estudio realizado recientemente por la CANIRAC nacional, donde se avala que con los protocolos de “mesa segura” está garantizado que se disminuye el riesgo de contagio en un 95%.