Articular Sociedad-Iglesia, pro Migrantes

Migración es resultado de pobreza e injusticia social; reflexiones de la Red Clamor

 

 Paola Calderón Gómez.  

 

Prensa CELAM, 290419.-  Articular esfuerzos con organizaciones civiles y eclesiásticas para aumentar la incidencia en medio de la población migrante. Es una de las expectativas de Monseñor Álvaro Ramazzini, Obispo de Huehuetenango en Guatemala, al referirse a las acciones que deben surgir como efecto de la Asamblea de la Red Clamor, efectuada en Bogotá del 1 al 5 de abril.

 

Como responsable de la comisión de movilidad de la Conferencia Episcopal de Guatemala; el prelado, confía en que las reflexiones sobre la crisis humanitaria que viven las familias migrantes, motive acciones concretas. Entre ellas espera que, a corto plazo, se organice una reunión de los obispos de las jurisdicciones eclesiásticas fronterizas en México, Guatemala, Honduras, Salvador y Estados Unidos.

El propósito de esa iniciativa es aunar esfuerzos desde lo pastoral a partir de las experiencias con las familias afectadas por el fenómeno. Apreciación que surge en Monseñor Ramazzini, luego de ser testigo de las caravanas y en particular de problemáticas que afectan directamente a los niños que hacen parte de ellas, muchos de los cuales buscan reunirse con sus padres o familiares en Estados Unidos.

Según las estadísticas del Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala hasta septiembre de 2017, la población guatemalteca residente en Estados Unidos es de 2.790.661 personas, sin que haya una discriminación de las cifras de población infantil ni cuántos de ellos viven en condiciones de irregularidad.

Actualmente la Comisión Episcopal de Movilidad del episcopado guatemalteco, ofrece asesoría jurídica a los migrantes y trabajadores transfronterizos.

Su misión es sensibilizar a la sociedad a favor de la dignidad del migrante, compartiendo sus derechos y deberes, además de advertir sobre los riesgos que implican situaciones delictivas como la explotación laboral, sexual y comercial que se puede presentar en territorio de frontera.

Para Monseñor Ramazzini la Iglesia debe continuar en su esfuerzo de fortalecer y animar la pastoral migratoria para que responda al fenómeno de la movilidad humana y contribuya a la construcción de una sociedad justa y solidaria, sin fronteras.