Los ajustes en las participaciones que anunció el gobierno de la República a Durango, que en julio fueron de 600 millones y para agosto se estima que sean de poco más de 180 millones, han repercutido en el pago puntual de créditos a corto plazo, informó el gobernador José Aispuro Torres.
El mandatario duranguense señaló las grandes dificultades en el manejo económico del gobierno estatal, pues mensualmente para las nóminas de toda la administración estatal se requieren 680 millones de pesos, y si tan solo en un mes se ajustó en 600 millones de pesos, es difícil el manejo.
“Traemos presión en todas las áreas, tienen que privilegiar primero el pago a los trabajadores, tenemos créditos a corto plazo con los bancos que no se han podido atender, no se han podido cubrir entre otras cosas por la disminución que no teníamos contemplado que se nos disminuyeran en 600 millones de pesos en participaciones en julio”, dijo el ejecutivo.
Mensualmente, precisó, Durango llega a contar con entre 850 y 900 millones de pesos, y la nómina mensual de todas las dependencias asciende a los 680 millones.
De acuerdo con el ejecutivo estatal, durante julio se aplicó un recorte a las participaciones del Estado por 600 millones de pesos debido a disminuciones en la recaudación, por lo que los recursos participables a las entidades federativas disminuyeron.
Para este mes de agosto ya se les ha anticipado que habrá un ajuste de 180 millones de pesos, todo lo cual repercute y genera presiones en todas las áreas gubernamentales, aunque se ha privilegiado el pago de las nóminas de los trabajadores.
Recordó que la nómina de los maestros, de los trabajadores del sector salud, de los empleados del poder judicial y poder legislativo y los organismos autónomos corresponden a una única bolsa que sale del gobierno del estado, por lo que existen dificultades para hacer frente a los compromisos existentes.