“María, Auxilio de los Cristianos, te confiamos el camino de los creyentes en #China”, escribió el Santo Padre este 24 de mayo en su cuenta de Twitter.

“Te rogamos que presentes al Señor de la historia las tribulaciones y las fatigas, las súplicas y las esperanzas de los fieles que te invocan, ¡oh Reina del cielo! #OremosJuntos #MaríaAuxiliadora”, agregó el Papa Francisco.

El Papa Francisco elevó este clamor solo dos semanas después de que el Gobierno comunista de China arrestara al Cardenal Joseph Zen, acusado de colaborar con la defensa legal de activistas de las protestas pro democracia en Hong Kong.

El Cardenal fue acusado bajo la nueva ley de seguridad, a la que siempre se opuso en Hong Kong, una norma cuestionada por analistas que la consideran una mordaza legal del gobierno comunista para acallar las voces críticas al régimen.

La presión internacional, a la que se sumó también el Vaticano, hizo que el Gobierno comunista liberara al Cardenal bajo fianza.

El domingo 22 de mayo, el Papa Francisco invitó a los católicos a unirse hoy a la Jornada de Oración por la Iglesia en China, para que los fieles en el país asiático, “en libertad y tranquilidad, viva en comunión efectiva con la Iglesia universal y ejerza su misión de anunciar el Evangelio a todos, contribuyendo así también positivamente al progreso espiritual y material de la sociedad”.

El Santo Padre resaltó además que la Virgen María es hoy “especialmente venerada por los católicos en China, que veneran a la Auxiliadora como su Patrona, en el Santuario de Sheshan en Shanghai, en numerosas iglesias del país y en sus hogares”.