Papa Francisco transmite a México sus condolencias por muerte de Cardenal Obeso.
Redacción ACI Prensa, 120819.
El Papa Francisco expresó a la Iglesia en México su pésame por el fallecimiento del Cardenal Sergio Obeso Rivera, Arzobispo Emérito de Xalapa, y pidió a Cristo que “le otorgue la corona de gloria que no se marchita”.
El Cardenal Obeso Rivera falleció ayer domingo a la edad de 87 años. Será sepultado mañana martes en la Catedral de Xalapa.
En un telegrama enviado al Arzobispo de Xalapa, Mons. Hipólito Reyes Larios, el Santo Padre expresó su “sentimiento de pesar” y le pidió “que tenga la bondad de transmitirlo también a los familiares del difunto Prelado y a cuantos forman parte de esa arquidiócesis”.
“Recordando a este abnegado pastor que, durante años y con fidelidad, entregó su vida al servicio de Dios y de la Iglesia, ruego por el eterno descanso de su alma. Que el Señor Jesús le otorgue la corona de gloria que no se marchita. A todos imparto la bendición apostólica”, concluyó el Pontífice.
Obispos piden celebrar Misas por su descanso
Por su parte, la Secretaría General de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), también expresó su “gran tristeza y pesar” por el fallecimiento del Cardenal Sergio Obeso.
“Desde la certeza de nuestra fe, sabiendo que somos peregrinos en este mundo y que poseemos en prenda la vida futura en Cristo, suplicamos a Dios, Padre Misericordioso, lo reciba en su seno, donde un día nos uniremos todos en el banquete de su Reino”, manifestó en un comunicado publicado ayer.
Los obispos reconocieron la “entrega generosa” del Purpurado “a la Iglesia que peregrina en nuestro país, especialmente la gran labor de coordinación y responsabilidad principal que desempeñó como presidente de nuestra Conferencia Episcopal durante tres periodos”.
“Sobre todo, en algunos episodios significativos de la historia de nuestro país, participando en las negociaciones de paz y reconciliación de los Acuerdos de San Andrés, en los esfuerzos de restablecimiento de las relaciones entre el Estado Mexicano y la Santa Sede al promover la ley reglamentaria del artículo 130 Constitucional”, señalaron.
Asimismo, recordaron que también fue “responsable de los servicios de las Comisiones de Pastoral Social y del Clero, así como gran impulsor del proceso de canonización de San Rafael Guízar y Valencia”.
“Les rogamos encomendar su alma a Dios, ofreciendo tres misas por su eterno descanso”, pidieron a los fieles.
Su vida
Sergio Obeso Rivera, Arzobispo Emérito de Xalapa, nació el 31 de octubre de 1931. Tras finalizar los estudios humanísticos fue enviado a Roma donde estudió en la Pontificia Universidad Gregoriana, allí se doctoró en Teología.
Fue ordenado sacerdote el 31 de octubre de 1954, cuando tenía solo 23 años de edad. Posteriormente volvió a México donde desarrolló diversos encargos en el Seminario. El 30 de abril de 1971, con 39 años de edad, fue nombrado Obispo de Papantla, recibiendo la ordenación episcopal el 21 de junio de ese mismo año.
El 15 de enero de 1974 fue designado Arzobispo Coadjutor de Xalapa, sede que asumió plenamente el 12 de marzo de 1979.
En noviembre de 1982 fue elegido Presidente de la Conferencia Episcopal Mexicana, por dos periodos y en 1995, relegido en ese cargo.
En el año 2007 el Papa Benedicto XVI aceptó su renuncia al gobierno pastoral de la Arquidiócesis de Xalapa por haber llegado a los 75 años, el límite de edad para el servicio episcopal.
El Papa Francisco lo creó cardenal en el consistorio del 28 de junio de 2018 junto a otros 13 purpurados.