El director de la Preparatoria Diurna de la Universidad Juárez del Estado de Durango, Emilio Piz Rosas, manifestó que, ante el regreso a clases presenciales de los jóvenes y adolescentes, se estableció un programa de atención psicológica, y es que se calcula que hasta dos de cada 10 necesitarían un apoyo de este tipo después del confinamiento por la pandemia de Covid-19.
La institución se preocupa tanto por el tema académico, educativo, pero también por la estabilidad de los alumnos en lo social y emocional, por lo cual se ve la necesidad de una intervención o con la ayuda psicológica y de terapia en los casos en que se observe algún tipo de situaciones más complicadas, anotó.
La edad de los alumnos que particularmente cursan este nivel académico exige mucha atención por parte de los maestros y del personal de la escuela, porque se observa que puede haber cierta vulnerabilidad a temas como depresión, drogas, suicidios o algunas otras condiciones que se han visto en esta temporada como el proceso de un duelo.
Manifestó que durante la primera semana en que se ha tenido contacto con los alumnos de manera presencial se tuvieron acercamientos, observaciones y pláticas para detectar si alguno requiriera ayuda, para ello se cuenta con personal especializado.
Respecto al regreso presencial a las aulas, consideró que todo se llevó a cabo de manera ordenada con buenos resultados hasta ahora.