La baja participación ciudadana en la jornada electoral del pasado domingo trae varios factores de fondo: una marcada desilusión, frustración, enojo y hasta mofa, aunado a una decepción de la clase política que se ha desprofesionalizado, expuso el psiquiatra Manuel Salazar Enríquez, al hacer un análisis del comportamiento social en la elección.
La clase política quiso vender la pasada elección como una de las más grandes, lo que generó una alta expectativa, donde se esperaba que la sociedad participara, se involucrara, sin embargo, hay aspectos que no se atendieron y que terminaron generando un alto abstencionismo.
El escenario desde una óptica social deja sobre la mesa desde el tema de la pandemia, que si bien es cierto es un elemento a esgrimir, la realidad es que no puede considerarse como una variable de peso porque desde hace tiempo los ciudadanos dejaron el aislamiento social, la situación en este sentido se ha relajado, se han abierto lugares y la gente está saliendo a las calles.
Un factor sumamente importante es la desilusión que tiene la gente en torno a la clase política, ese es el tema central y está asociado incluso a los perfiles que se candidatearon, consideró para profundizar en que las nuevas generaciones han visto un perfil de políticos poco atractivos, que se saturan más de memes y mofa, que de análisis puntual y responsable.
“Hay candidaturas que hasta se han caricaturizado, cantantes, luchadores músicos, etc., es un fenómeno que deja ver que los políticos profesionales han dejado una vara muy corta o zapatos delgaditos, que son atractivos a cualquier ciudadano para ser votado independientemente de la preparación (…) la política se ha desprofesionalizado”, resaltó.
Mencionó asimismo la polarización que se vio, donde “o estas con el presidente o en su contra: eres de una categoría o de otra; la ofensa de ver candidatos que no tienen idea de que están haciendo, y un miedo a la violencia”, son otros factores que cocinaron el abstencionismo que se dio en la pasada jornada.
La política se ha desprofesionalizado para volverse una cuestión de acomodos, de posiciones y de puestos de guerra, consideró el psiquiatra, quien agregó que la polarización amerita un análisis fuerte en el sentido de estar generando grupos de mexicanos de una categoría y de otra.
- Finalmente, se refirió al desinterés de las nuevas generaciones, en un contexto de desilusión generada por los partidos y políticos al ver candidatos que no tienen ni idea de lo que van a hacer.