La directora del CEPAAD Durango, Alejandra Arciniega, manifestó que sí hubo un repunte en el consumo de alcohol y otras drogas durante la pandemia, ya que muchas personas intentaron evadir diversas situaciones a través del consumo.
“Sabemos que fue un año complicado donde imperó la ansiedad y algunos factores que predisponen hacia el consumo de sustancias “, por ello se observó un repunte sobre todo en jóvenes, según explicó.
Puso como ejemplo el comportamiento de la población a raíz de las restricciones a la venta de alcohol, donde hubo compras de pánico, violaciones a las restricciones y cierta desesperación por asegurar el consumo de bebidas etílicas.
“Vemos que hay personas que han aprendido a utilizar el consumo de sustancias como una alternativa a enfrentar el estrés”, subrayó.
Sin embargo, manifestó que poco se detienen a ver lo que hay de trasfondo, y es que la realidad es que el consumo de alcohol perjudica mucho porque es una droga que altera la capacidad de juicio, y entonces lleva a no seguir los protocolos sanitarios requeridos, como la protección del uso del cubrebocas, y eso hace un tema complicado en materia sanitaria.
Por otro lado, anotó que a nivel de atención se observa un incremento en el consumo de metanfetaminas, que es la causa más frecuente por la que una persona busca ayuda en el CEPAAD.