El 2020 ha sido un año enmarcado en graves complicaciones para el sector de la construcción, desde los recortes presupuestales hasta la cancelación de fideicomisos y un panorama para el 2021 que no pinta bien, justamente porque la federación ha continuado con las disminuciones a pesar de una economía destruida por la crisis sanitaria.
Así lo expresó Miguel Ángel Reveles, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), quien señaló que la construcción ha sido golpeada durante este año por varias circunstancias que van desde los recortes presupuestales del Gobierno Federal, que se dejaron sentir desde el principio del 2020, luego se tuvo la cancelación de fideicomisos y en general poca inversión que puso en aprietos a las empresas.
Recordó que hace dos o tres años la Secretaría de Comunicaciones y Transportes ejercía presupuestos de hasta 3000 millones de pesos en Durango, este año que está por concluir fueron solamente 900 y para el 2021 se habla de menos de 600 millones de pesos.
Este año, una esperanza fue el crédito que pidió gobierno del estado de mil 715 millones de pesos, y que va fluyendo, aunque muy lento, pero reactivó la economía en un momento crucial.
En este momento hay algunas 34 obras que están ejercicio, se han llevado a cabo más de 90 licitaciones y todavía faltan algunas 250 en diversos municipios que se van a desarrollar.