Con las clases virtuales que se desarrollaron debido a la crisis que se atraviesa, se dio un aumento en problemas visuales en niños y adolescentes; este fenómeno creció un 35% de acuerdo con lo señalado por el optometrista Orlando Solís.
En entrevista explicó que si antes, del total de pacientes un 10% eran niños, a raíz de las clases virtuales y del uso constante de dispositivos tecnológicos este porcentaje creció hasta un 35%.
Las problemáticas empiezan desde no tener las actividades comunes que son físicas, al momento de estar encerrados también implica que la visión se acorta a un espacio de tres metros, esto crea incluso pseudomiopia, son problemas también acomodativos al estar horas sobre un mismo sistema de trabajo, que sería la computadora o celular. La realidad es que en cuestiones visuales, sí afecta el poco dinamismo en la visión lejana y corta, provocando alteraciones.
Explicó que en cuestiones neurológicas también hay cierta problemática por que al estar tanto tiempo expuestos a la luz de los dispositivos se generan sustancias que pueden detonar a la larga en una problemática de claridad visual.
No siempre es necesario utilizar lentes, a veces son circunstancias que pueden corregirse a través de terapias visuales, y sí se recomienda que se hagan algunas actividades preventivas para evitar daños en la visión por el uso obligado y constante de los dispositivos electrónicos como herramienta escolar.