Recuerda la CEM que el Bautizado es un Templo Vivo de Dios.
José A. Salazar I. (D-21.com).
DURANGO, DGO., 141120.- En un abrazo de los Obispos a los mexicanos en Pandemia, los excitan a convertir en templo vivo su persona, familia, hogar y trabajo, y a traducir en obras su Mensaje Nacional tras su 109ava. Asamblea.
Enfrentar desafíos del país en todos los órdenes, exigen la acción de los laicos –los no clérigos- a la luz de Cristo, según se desprende de lo dicho por el Arzobispo Faustino Armendáriz Jiménez, en La Voz de la Arquidiócesis.
Desde cuidarse y cuidar a otros responsablemente, del Covid-19, y más ante la saturación de centros hospitalarios, un personal sanitario cansado y en casos con carencia de insumos… hasta todo lo que reclama acción social o política.
Mons. Arizmendi sugirió leer el Mensaje del Episcopado en la página de la CEM y en la propia de la arquidiócesis, a fin de ahondar a detalle su contenido y hacerlo guía del despliegue católico ante la situación nacional y regional.
Vale recordar que hace tres años la CEM llamó la atención sobre la crisis múltiple que azota al país, sobre todo espiritual, social (miseria, inseguridad), económica y política. En el siguiente alertó, por ejemplo, que no se votase “en cascada” o corríamos el riesgo de propiciar una dictadura.
Y al día siguiente de los Comicios federales últimos, -020718-, el Episcopado advertía la necesidad de que todo ciudadano, sobre todo los bautizados, se involucrasen (EN PRIMERA PERSONA) en la toma de decisiones a todo nivel, corresponsablemente: calle, barrio, ejido, comunidad, Municipio, Estado o Región, ante la realidad de que ningún político es Dios.
Solo bajo tal INVOLUCRAMIENTO SON GARATIZADOS LIBERTAD Y DERECHO.