En el marco del evento conmemorativo del Día del Médico, se honró a los galenos que han fallecido en medio de la emergencia sanitaria por Covid-19; además, Lourdes Jiménez, esposa del doctor Manuel Ramírez, propuso construir un muro con los nombres del personal de salud fallecido, para recordarlos y reconocerlos.
En el evento, el Gobernador José Aispuro Torres hizo un extenso reconocimiento al personal médico que labora y que enfrenta el Covid-19, que ha dejado al menos 777 decesos oficialmente, por lo que aceptó la petición de crear un muro en memoria de los médicos fallecidos, al reconocer que es lo menos que la sociedad puede hacer por ellos.
En su discurso, el ejecutivo estatal demandó a la sociedad duranguense cuidarse para evitar los contagios, pues ese es el mejor reconocimiento que pueden hacer los ciudadanos al personal médico que atiende a los enfermos de Covid-19.
“No queremos que más personal de salud siga perdiendo la vida”, subrayó el ejecutivo estatal.
Abundó que tampoco se quiere que más personas sigan perdiendo la vida, por eso instó a usar al menos el cubrebocas y a mantener la sana distancia, además de exhortar a los jóvenes a evitar acudir a reuniones, pues en ellas ocurren gran cantidad de contagios.
Reiteró que, en caso de continuar los contagios a la alza, se deberán tomar medidas más drásticas para evitar la movilidad de la población y con ello los contagios.
Antes del discurso del Gobernador, hizo uso de la palabra la señora Lourdes Jiménez, quien pidió recordar a los médicos que han perdido la vida con un muro en donde se inscriban los nombres de los fallecidos, y también expuso que a quienes han perdido algún familiar es a quienes realmente les ha cambiado la vida el Covid-19.
Señaló la existencia de personas que se quejan por el cambio de vida que se ha dado por el virus, y por haber sufrido la pérdida de trabajo, de actividad económica, sin embargo señaló que a quienes realmente la vida les ha cambiado es a quienes han perdido a algún ser querido, pues es irreparable.