Ante las afectaciones que registra el Área Natural Protegida del Cañón de Fernández por la invasión de cuatrimotos y razers, la senadora Margarita Valdez Martínez promovió un exhorto a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para implementar un programa de preservación que impida el ingreso a la zona de este tipo de vehículos.
La Senadora recordó que el Cañón de Fernández cuenta con una superficie de 17 mil hectáreas y desde el 2004 se le declaró a nivel estatal Área Natural Protegida, sin embargo se carece de control de visitantes pues no se cuenta con una vigilancia formal en el parque en el que viven 581 especie, de las cuales 25 son endémicas.
El Cañón de Fernández se ubica en el municipio de Lerdo, expuso la senadora, en una zona semidesertica por la que cruza el río Nazas, en donde se encuentran en riesgo los ahuehuetes existentes, así como el pez conocido popularmente como cachorrito del Nazas.
Para la senadora la falta de control en el ingreso a la zona, ha permitido que algunas personas acudan en razers y cuatrimotos pese a que hay quejas sobre que con dichos vehículos se han arrollado a las tortugas de la zona, por lo que es necesario colocar una vigilancia para impedir el ingreso de dichas unidades de transporte.
Valdez Martínez señaló la existencia de un grupo de personas que ingresa a la zona y que ha buscado el amparo de la justicia federal para ingresar sin importarles el daño que puedan hacer con sus vehículos al ingresar a la zona.