Aùn inspira a Irlanda, San Patricio

(IN MEMORIAM.- Vale recordar y reconocer la solidaridad de aquel Batallòn de San Patricio que, ante la guerra invasora de EUA, –que nos costò medio territorio y el inicio de nuestro calvario con los apàtridas– se pasaron al Ejèrcito Mejicano. Todos los que asi optaron, fueron azotados, escupidos, marcados, muchos ahorcados… por la patria mexicana. Honor a Irlanda y a sus hijos de ayer, hoy y siempre.  Lo contrario, a los mal nacidos pseudo mejicanos que traicionaron en aquel momento, — momento de masas, como las de hoy y las de siempre, NO DE CIUDADANOS–: Antonio Lòpez de Santana, Juan Âlvarez, y un largo rosario de abortos de la mejicanidad, incluidos los de hoy que doblan la deuda y cacarean la migaja para “maicear gente”, con la venia y descarado apoyo de los plutòcratas.

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San Patricio, ejemplo de esperanza cristiana que aún inspira a Irlanda.

Por Almudena Martínez-Bordiú.

ACIPRENSA, 17 de marzo de 2025.

 

En la festividad de San Patricio, celebrada este 17 de marzo, el Arzobispo Eamon Martin propuso al patrón de Irlanda como un ejemplo de esperanza cristiana “forjada en la adversidad” y arraigada en la fe.

 

El conocido como “Apóstol de Irlanda” debió hacer frente a numerosas adversidades, especialmente durante el tiempo de cautiverio en la tierra de la que más adelante se convertiría en obispo. Sin embargo, “a pesar del dolor, la soledad y el aislamiento que ello conllevó, se atrevió a esperar en Dios”, destacó el arzobispo.

 

Patricio, cuyo nombre de pila fue Maewyn Succat, nació en Britania —hoy Gran Bretaña— alrededor del año 386 en una familia cristiana. Siendo muy joven su casa fue saqueada por unos vándalos, quienes lo llevaron a la fuerza rumbo a la isla vecina, Irlanda, donde fue vendido y obligado a trabajar en condición de esclavo.

 

Tras recobrar su libertad, inició el camino espiritual que lo conduciría al sacerdocio. Más tarde regresó de nuevo a las costas de Irlanda, “como un discípulo misionero de esperanza en el Señor Resucitado”, subrayó el prelado irlandés.

 

La esperanza cristiana, “mucho más que un simple optimismo humano”

Desde la catedral de San Patricio en Nueva York (Estados Unidos), en la que se encuentra tras realizar una peregrinación jubilar, Mons. Martin recuerda a los inmigrantes irlandeses que llegaron a Estados Unidos en el siglo XIX.

 

Destacó además que un gran número de irlandeses y sus descendientes ayudaron a construir “la gran ciudad de Nueva York”, convirtiéndose en líderes en sus parroquias y comunidades. Además, indicó que los diez arzobispos de Nueva York desde 1850 nacieron en Irlanda o tuvieron padres o abuelos irlandeses.

 

“La esperanza que los irlandeses llevaron consigo era mucho más que simple optimismo humano. Era una esperanza forjada en la adversidad y arraigada en la misma fe fuerte que, siglos antes había inspirado a San Patricio a seguir adelante, confiando en Dios”, subrayó.

 

Para el prelado irlandés, la esperanza de estas personas “no era solo un sentimiento”, sino la esperanza cristiana, “que es una forma de vivir, de ser y de actuar que va más allá de los desafíos personales, confiando en Dios”.

 

“La esperanza cristiana enfrenta las dificultades de esta vida con la certeza de la Resurrección y con la mirada puesta en la vida eterna, en nuestra patria celestial. La esperanza es un llamado a la acción por la paz, la justicia y la solidaridad con quienes están en dificultades, especialmente los pobres y los marginados”, precisó Mons. Eamon Martin.

 

“Como hijos e hijas de San Patricio, en lo más profundo de todos nosotros, la voz de Dios nos desafía a ser peregrinos de esperanza en este mundo atribulado”, agregó.

 

En este contexto, invitó a los fieles de Irlanda a seguir el ejemplo de su patrón y a “marcar la diferencia”, siendo “embajadores valientes de la esperanza y la caridad; pacificadores activos; cuidadores compasivos de los enfermos y los solitarios; fieles administradores de la creación de Dios; generosos ayudantes de los pobres y marginados, y amigos acogedores para aquellos que, como Patricio y tantos de nuestros antepasados irlandeses, han sido desplazados por la fuerza de su tierra natal”.

 

“Una esperanza más fuerte que la muerte”

Asimismo, en un comunicado difundido desde la Conferencia Católica de Obispos Irlandeses, los prelados ensalzaron también el sufrimiento que padeció San Patricio como migrante para animar a los católicos del país a acoger y brindar apoyo y solidaridad a las personas que han llegado desde otros lugares y también por la paz en el mundo.

 

“El mensaje de San Patricio es que hay una esperanza más profunda y fuerte que cualquier crisis, cualquier sentimiento de alienación o cualquier miedo. Es una esperanza más fuerte incluso que la muerte”, se lee en el mensaje.

 

La paz, la reconciliación y la esperanza son el corazón del mensaje de San Patricio para todos nosotros en este Año Jubilar.

 

Bendición de carreteras

Con motivo de esta festividad, Mons. Fintan Monahan, Obispo de Killaloe (Irlanda), también animó a las parroquias a orar de manera especial por el bienestar “y la protección de todos aquellos que viajan por nuestras carreteras”.

 

Su llamamiento se produce cuando las últimas cifras revelan que 42 personas han perdido trágicamente la vida en las carreteras de toda la isla de Irlanda en lo que va de año.

 

Por ello, este lunes, día de San Patricio, el Obispo Monahan ofició una ceremonia especial de “Bendición de los Caminos” en Ennis (Irlanda), y también bendijo las carreteras de los alrededores.

Etiquetas: Irlanda, San Patricio, Iglesia en Irlanda, noticias católicas

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