Sobreviven Cura y 0tros, baleados en zona de narcoguerra

Sacerdote sobrevivió a un ataque armado en México: “Vi la mano de Dios en cada momento”

Por Diego López Colín.

ACIPRENSA, 21 de enero de 2025.

 

El P. Lorenzo Medina fue herido en un brazo por un arma de fuego en el estado mexicano de Chihuahua. El ataque ocurrió mientras viajaba junto a otras cinco personas hacia su comunidad, en el municipio de Guadalupe y Calvo.

 

Según informó la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, el ataque ocurrió el 17 de enero, mientras el grupo se dirigía de la cabecera municipal hacia el poblado de Dolores, donde se encuentra la cuasi parroquia de Nuestra Señora del Rosario, atendida pastoralmente por el P. Medina. En el camino, de acuerdo a las autoridades, el sacerdote y quienes viajaban junto a él “repentinamente escucharon un estruendo, y pensaron que había estallado uno de los neumáticos y se bajaron para revisarlo”.

 

“Entonces escucharon detonaciones de arma de fuego, por lo que nuevamente subieron a la unidad para retirarse del lugar, y fue en ese momento en que resultaron heridos, y se trasladaron a un nosocomio para recibir atención médica”, indica el comunicado de la Fiscalía.

 

Como resultado de esta acción, una mujer de 69 años y el sacerdote, de 41, resultaron heridos. Según las autoridades, ambos se encuentran fuera de peligro.

 

Por su parte, la Diócesis de Parral, a la que pertenece el P. Medina, publicó un comunicado el mismo día del ataque, informando que el sacerdote “fue dado de alta, y recibirá seguimiento médico los próximos días”.

 

Asimismo, hizo un llamado a las autoridades para que “el clima de violencia de la región cese, pues son cada vez más los desplazados y afectados por esta situación”.

 

El municipio de Guadalupe y Calvo, situado en el extremo sur de Chihuahua, se encuentra sumida en la violencia a causa de la acción del crimen organizado. La localidad colinda con el municipio de Badiraguato, en el estado de Sinaloa, conocido por ser el lugar de origen de Joaquín “el Chapo” Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, uno de los grupos criminales más poderosos de la región y que actualmente purga cadena perpetua en Estados Unidos.

 

De acuerdo con la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Chihuahua, desde 2021 se han reportado desplazamientos forzados de comunidades indígenas en este municipio “a causa de la inseguridad y violencia”.

 

Por su parte, las autoridades señalaron que mantienen un despliegue operativo en la región “a fin de brindar seguridad a los habitantes y dar con el paradero del o los presuntos responsables de esta agresión”.

 

Puede haber sido “una equivocación”

En entrevista con ACI Prensa, el P. Medina expresó que considera improbable que el ataque estuviera dirigido contra él. “La hipótesis más fuerte es que haya sido una equivocación”, dijo.

 

“Estaba nublado y los enfrentamientos [entre grupos del crimen organizado] son muy intensos, sobre todo en el camino. Yo siento que ese ambiente intenso, lamentablemente, favoreció para que haya esa reacción”, explicó.

 

El sacerdote señaló que en la región donde realiza su labor pastoral hay presencia de dos grupos criminales en constante enfrentamiento por el control del territorio. Sin embargo, aseguró que, en sus encuentros previos con ellos, “no he tenido ningún problema, nada. Entramos a las comunidades, nos dejan pasar inclusive de manera respetuosa”.

 

El P. Medina detalló que “normalmente cuando uno está en esos lugares, lo detienen los sicarios”. En esos encuentros, después de algunas preguntas, suelen permitir el paso sin inconvenientes; sin embargo, precisó que esta vez “no hubo un retén, sino que nos tiraron directo. No fue un fuego cruzado, fue directo. Tampoco fue así como para asustarnos, fue directo, o sea, para agredirnos”.

 

“Vi la mano de Dios en cada momento”

El sacerdote describió el trayecto de regreso en busca de atención médica para la mujer, a quien a bala le entró por la mejilla como un “martirio”, pero aseguró que fue Dios quien “nos dio la oportunidad de llegar, de que la atendieran y de que las demás personas no recibieran ningún balazo”.

 

A pesar de las dificultades, el P. Medina expresó su certeza de que “Dios se manifestó de muchas maneras en esa tragedia, siento que estuvo allí” acompañándolos.

 

Mencionó que durante el trayecto de regreso, vivió momentos de angustia, como cuando la señora herida estaba “gritando que se estaba ahogando, se estaba muriendo”. Sin embargo, el sacerdote destacó que “Dios me dio mucha templanza, mucha fortaleza, sobre todo para llevar ese momento tan intenso”.

 

Su calma no sólo le permitió reaccionar rápidamente, sino también brindar consuelo espiritual a la mujer herida, a quien le preguntó “si se arrepentía de sus pecados y le di la absolución, y rezábamos en el camino”.

 

Al ser cuestionado sobre si dejaría su labor pastoral debido al incidente, el P. Medina expresó su firme decisión: “voy a seguir sirviendo como sacerdote”. Ahora está a disposición del obispo y permanecerá en la ciudad de Parral, apoyando parroquias mientras se decide su futuro.

 

Después de saber que se encuentra físicamente bien y tras confesarse, indicó que se siente “fortalecido, me siento con fe, porque vi la mano de Dios en cada momento”. “Espiritualmente, me siento bendecido, me siento acompañado y me siento amado”, concluyó.

 

Etiquetas: Ataque a sacerdote, noticias católicas, ataque contra sacerdotes, Iglesia Católica en México, Diócesis de Parral

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