Después de 17 años de operación, el Centro de Rehabilitación Infantil Análco (CRIA) podría cerrar sus puertas, confirmó el alcalde Antonio Ochoa. La decisión responde a una evaluación de la rentabilidad del programa, que señala una alta inversión en comparación con los resultados obtenidos.
En lo que va del año, el CRIA ha atendido a 23 menores de edad, de los cuales solo 6 están actualmente en el centro. Sin embargo, el municipio ha destinado 9 millones de pesos al programa, 5 millones de ellos en nómina para 40 trabajadores. Esto equivale a un costo promedio de $360,000 pesos por menor atendido, cifra que, según el alcalde, sería menor si se cubriera la rehabilitación en centros privados.
“Los programas que no tengan la rentabilidad necesaria en cuanto a inversión y que no generen cambios en los indicadores deberán desaparecer. Este análisis ya está en reglamento y en ley, y eso es lo que se está haciendo”, explicó Ochoa.
El director del DIF municipal señaló que, en caso de cerrar el CRIA, se buscará reubicar a los trabajadores en otras áreas para minimizar el impacto laboral. Mientras tanto, la administración continúa evaluando alternativas para mantener el apoyo a menores que requieren rehabilitación.