Cae Ministro Barnier y peligra Macron, en Francia

Gobierno francés cae en moción de censura

DW, 041224.

Hasta el último momento, el primer ministro, Michel Barnier, trató de obtener apoyos para mantenerse en el cargo, pero la extrema derecha de Le Pen le dio la espalda y los socialistas no escucharon sus llamamientos.

 

Los diputados de izquierda y de ultraderecha tumbaron este miércoles (04.12.2024) al gobierno del primer ministro francés, Michel Barnier, entre llamados a la dimisión del presidente Emmanuel Macron en plena crisis política en la segunda economía de la Unión Europea.

 

Por 331 votos a favor, por encima de la mayoría absoluta de 288, la Asamblea Nacional (cámara baja) puso fin a los menos de 100 días de gobierno de Barnier, rechazando a su vez sus presupuestos para 2025.

 

Aunque la censura no afecta al presidente centroderechista, cuyo mandato termina en 2027, lo debilita mucho más, máxime cuando decidió en septiembre nombrar a Barnier como primer ministro en nombre de la “estabilidad”.

 

“Hoy votamos la censura de su gobierno, pero sobre todo marcamos el fin de un mandato: el del presidente”, estimó el diputado Éric Coquerel, al defender la moción de censura de la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP).

 

Sin pedir directamente su dimisión, la líder del partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN), Marine Le Pen, llamó a Macron, con quien se disputó la presidencia en 2017 y 2022, a pensar si puede continuar en el cargo.

 

“Corresponde a su conciencia decidir si puede sacrificar la acción pública y el destino de Francia a su orgullo. Corresponde a su razón decidir si puede ignorar la evidencia de un repudio popular masivo”, subrayó.

 

El martes, el presidente, de visita en Arabia Saudita, calificó de “política ficción” una eventual dimisión antes de 2027, cuando termina su segundo mandato. El mandatario de 46 años ya no puede optar a la reelección.

 

Le Pen aparece en posición de fuerza en los sondeos para alcanzar la presidencia, pero la justicia podría frustrar su sueño si el 31 de marzo decide inhabilitarla durante 5 años, como pide la fiscalía en un caso de malversación de fondos europeos.

ct (afp, efe).

NOTA RELACIONADA.

Alemania y Francia: dos Gobiernos se quedan sin dinero

Andreas Noll.

DW, 13/11/202413 de noviembre de 2024.

En París, el presupuesto para 2025 fracasó en el Parlamento, mientras Berlín también comienza el nuevo año sin presupuesto definido. Los fondos públicos se agotan y las consecuencias no sólo golpean a ambos países.

 

El canciller alemán, Olaf Scholz, y el primer ministro francés, Michel Barnier, tienen actualmente problemas similares: quieren dar forma a la política, pero no reciben (más) dinero del Parlamento para hacerlo.

 

El martes (12.11.2024) por la noche, la Asamblea Nacional de París rechazó por amplia mayoría la primera parte del presupuesto para 2025, que se refiere al capítulo de ingresos. La bancada gubernamental y los diputados de la derechista y populista Agrupación Nacional rechazaron el proyecto por 392 votos contra 192.

 

Fue el resultado de un debate de dos semanas, en el que la alianza de izquierdas, que representa el mayor bloque político del Parlamento, había remodelado el proyecto gubernamental a su manera con enmiendas.

 

Se incluyeron en el proyecto un impuesto sobre el patrimonio para los multimillonarios, un impuesto sobre los dividendos de las grandes empresas, un impuesto sobre las empresas multinacionales y mayores impuestos para las empresas digitales, así como un nuevo impuesto sobre las motocicletas especialmente ruidosas. Sin embargo, el impuesto más elevado sobre la electricidad y la calefacción de gas previsto por el Gobierno fue anulado por los diputados sin alternativa.

 

Alemania y Francia: ¿con o sin presupuesto?

El presupuesto nacional es el programa gubernamental expresado en cifras. Berlín y París carecen de él, justamente en estos turbulentos tiempos. Mientras que Michel Barnier aún puede esperar un presupuesto regular en 2025 a pesar de esta derrota, éste ya no será el caso para el actual Gobierno minoritario de Berlín. En el mejor de los casos, aún podría aprobarse un presupuesto suplementario para 2024, con el apoyo de la oposición, antes de la disolución del Parlamento.

 

Esto se ha hecho necesario porque el Gobierno sigue careciendo de dinero este año. Deben financiarse 3.700 millones de euros de gasto adicional para la pensión básica y más de 10.000 millones de euros para la demanda adicional de fomento de las energías renovables. El Gobierno debe encontrar el dinero antes de finales de año o reaccionar con una congelación presupuestaria.

 

Berlín y París: debilitados en Bruselas y Washington

Cuando Donald Trump se instale por segunda vez en la Casa Blanca, el 20 de enero, es probable que se disuelva el Bundestag. Poco menos de cinco semanas después, el 23 de febrero, los alemanes elegirán un nuevo Parlamento. Dependiendo del resultado de las elecciones, la formación de un Gobierno podría prolongarse hasta bien entrada la primavera.

 

Alemania seguiría teniendo un canciller y ministros tras la disolución del Parlamento por el presidente federal, pero sólo a título ejecutivo. Durante la fase de transición, ya no podrían tomar ninguna decisión fundamental o de gran alcance.

 

Sólo un nuevo Gobierno negociará con el nuevo Ejecutivo de Trump o impulsará decisiones a nivel de la Unión Europea (UE). Hasta entonces, habrá que esperar y ver. Pero quizá también algunos puedan respirar aliviados, pues la fracasada coalición tripartita ha sido considerada un socio difícil en Bruselas. Con el “voto alemán”, o la abstención, la coalición de Gobierno de Alemania evitó repetidamente decisiones delicadas en los últimos años, como en las dos votaciones sobre la Ley de la Cadena de Suministro de la UE y la normativa de emisiones para camiones.