Las malas condiciones que presentan los caminos en la zona de la periferia de la ciudad provoca afectaciones en la suspensión de los camiones del transporte urbano que llegan a tener un costo de al menos 8 mil pesos, informó Humberto Regidor , representante de la CTM.
En algunas otras ocasiones, las pérdidas son mayores para los concesionarios, pues se llegan a erogar hasta 50 mil pesos cuando las afectaciones son mayores en la suspensiones de los autobuses.
Pese a esos gastos, los concesionarios asumen los costos porque un autobús parado resulta más costoso que el pago mismo de la reparación.
Santana reconoció mayores problemas durante la temporada en la que se incrementan los precipitaciones pluviales, pues se reproduce la cantidad de tramos en dónde los hoyos están más que presentes en las rutas.
Descartó que una solución sea el recortarlo recorridos de los autobuses del transporte urbano, ya que con ello se marginaría del servicio a algunos habitantes.
En ese contexto sobre la necesidad de contar con la solidaridad de las autoridades para poder atender a la brevedad posible, estos caminos que se llegan a descomponer de forma importante con las lluvias.