Aumentan en Mèxico, Migraciòn y su Mortalidad

México: tráfico de migrantes crece y sigue cobrando vidas

Camilo Toledo-Leyva.

DW, 200824.

Un niño migrante muerto dejó la disputa de bandas criminales por la zona fronteriza con EE. UU. El tráfico de migrantes es uno de los negocios más lucrativos para el crimen organizado en México, según expertos.

Una vez más, una camioneta que transportaba a migrantes hacia la frontera con Estados Unidos fue acribillada el último fin de semana en el estado de Sonora, al norte de México. El saldo: un menor de edad muerto, ocho migrantes heridos y el vehículo completamente calcinado. El ataque ocurrió exactamente en la carretera entre las localidades de Tubutama y Sáric, a solo unos 50 kilómetros de la frontera internacional.

De acuerdo con medios locales, el niño fallecido sería mexicano, mientras que los heridos serían haitianos. Sin embargo, la nacionalidad de estos aún no ha sido confirmada por las autoridades mexicanas. La región fronteriza en Sonora es un área en disputa por bandas criminales que buscan controlar el tráfico de migrantes, armas y drogas. Allí operan el cártel de Sinaloa, el cártel Jalisco Nueva Generación y el cártel de Caborca.

“En esta zona hay constantemente muertes violentas de migrantes. La población está muy acostumbrada a ello”, confirma a DW, desde Sonora, la experta en temas de migración y activista Tamara Aranda. “Seguramente era la camioneta de un “pollero” (traficante de personas) que llevaba gente a la frontera y quizá no quiso pagar cupo a los cárteles”, supone.

El ataque recordó un hecho similar ocurrido en febrero pasado, cuando un niño y dos mujeres migrantes fueron asesinados mientras viajaban en una camioneta en la cercana localidad de Caborca.

“No han dado mucha información hasta ahora, pero cómo es posible que una van con menores llegue hasta Sonora, después de haber atravesado varios estados y kilómetros, sin haber sido parada por alguna autoridad, a menos que estén coludidas con estas”, critica Gloria Valdez, coordinadora del Seminario de asesoría Niñez Migrante del Colegio de Sonora, asociación que acoge a niños y adolescentes migrantes.

El millonario negocio del tráfico de personas

Sólo entre enero y junio de este año se registraron 741 homicidios en Sonora, de acuerdo con datos oficiales. Debido a los múltiples asesinatos, secuestros y extorsiones, la frontera entre México y Estados Unidos se ha convertido en la ruta migratoria terrestre “más peligrosa” de todo el mundo, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

A pesar de ello, cerca de un millón de personas cruzaron por Sonora en 2023. Números que son aprovechados por los traficantes de personas para su negocio ilegal.

Datos de 2022 de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) muestran que el tráfico de personas llega a generar mundialmente ganancias por 31.000 millones de dólares. Y el que se realiza de América Latina hacia Estados Unidos, en una estimación conservadora, sería de 8.500 millones de dólares.

Por su parte, la organización Insight Crime calculó en una investigación de 2023 que tan sólo en el cruce de México hacia Estados Unidos, el tráfico ilegal de migrantes puede generar ganancias por más de 12.000 millones de dólares al año para estas bandas criminales.

Una vez más, una camioneta que transportaba a migrantes hacia la frontera con Estados Unidos fue acribillada el último fin de semana en el estado de Sonora, al norte de México. El saldo: un menor de edad muerto, ocho migrantes heridos y el vehículo completamente calcinado. El ataque ocurrió exactamente en la carretera entre las localidades de Tubutama y Sáric, a solo unos 50 kilómetros de la frontera internacional.

De acuerdo con medios locales, el niño fallecido sería mexicano, mientras que los heridos serían haitianos. Sin embargo, la nacionalidad de estos aún no ha sido confirmada por las autoridades mexicanas. La región fronteriza en Sonora es un área en disputa por bandas criminales que buscan controlar el tráfico de migrantes, armas y drogas. Allí operan el cártel de Sinaloa, el cártel Jalisco Nueva Generación y el cártel de Caborca.

“En esta zona hay constantemente muertes violentas de migrantes. La población está muy acostumbrada a ello”, confirma a DW, desde Sonora, la experta en temas de migración y activista Tamara Aranda. “Seguramente era la camioneta de un “pollero” (traficante de personas) que llevaba gente a la frontera y quizá no quiso pagar cupo a los cárteles”, supone.

El ataque recordó un hecho similar ocurrido en febrero pasado, cuando un niño y dos mujeres migrantes fueron asesinados mientras viajaban en una camioneta en la cercana localidad de Caborca.

“No han dado mucha información hasta ahora, pero cómo es posible que una van con menores llegue hasta Sonora, después de haber atravesado varios estados y kilómetros, sin haber sido parada por alguna autoridad, a menos que estén coludidas con estas”, critica Gloria Valdez, coordinadora del Seminario de asesoría Niñez Migrante del Colegio de Sonora, asociación que acoge a niños y adolescentes migrantes.

El millonario negocio del tráfico de personas

Sólo entre enero y junio de este año se registraron 741 homicidios en Sonora, de acuerdo con datos oficiales. Debido a los múltiples asesinatos, secuestros y extorsiones, la frontera entre México y Estados Unidos se ha convertido en la ruta migratoria terrestre “más peligrosa” de todo el mundo, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

A pesar de ello, cerca de un millón de personas cruzaron por Sonora en 2023. Números que son aprovechados por los traficantes de personas para su negocio ilegal.

Datos de 2022 de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) muestran que el tráfico de personas llega a generar mundialmente ganancias por 31.000 millones de dólares. Y el que se realiza de América Latina hacia Estados Unidos, en una estimación conservadora, sería de 8.500 millones de dólares.

Por su parte, la organización Insight Crime calculó en una investigación de 2023 que tan sólo en el cruce de México hacia Estados Unidos, el tráfico ilegal de migrantes puede generar ganancias por más de 12.000 millones de dólares al año para estas bandas criminales.

Los “polleros” o “coyotes” cobrarían por persona en el continente americano entre 5.000 y 20.000 dólares, dependiendo de diversos factores como el lugar de origen del migrante, los medios de transporte y el uso de documentos falsos.

Una opción más económica, pero más peligrosa es atravesar la selva del Darién, entre Colombia y Panamá, donde se paga a los contrabandistas de migrantes menos de 50 dólares por el pase fronterizo. Sin duda, un negocio criminal lucrativo, pero que no garantiza que los migrantes lleguen sanos o vivos a su destino.

“Los migrantes nos cuentan que tienen que pagar cifras similares desde su lugar de origen para llegar a Sonora, pero en la frontera con Estados Unidos, incluso, los pueden dejar colgados, en caso de que sean descubiertos por la patrulla fronteriza”, explica la activista Valdez.

Calcular cifras exactas es muy difícil y depende de la fuente, según la experta Aranda, “pero lo cierto es que, después de las armas y las drogas, el tráfico de personas es el negocio más lucrativo para el crimen organizado en México”.

Migración extracontinental en aumento

Lo nuevo es que a la migración proveniente de países de la región como Venezuela, Guatemala, Honduras o Haití se le está sumando la migración extracontinental. “Ahora tenemos en Sonora personas migrantes de cinco continentes: Asia, África, Oceanía, Europa y América”, cuenta Valdez.

Un estudio reciente de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) constató que el tráfico de personas hacia Estados Unidos ha evolucionado de tal forma que se están llegando a ofrecer paquetes VIP, que para los migrantes de Asia pueden valer hasta 60.000 dólares por persona. El costo depende del lugar de procedencia, desde África o Asia, desde donde las personas suelen ser trasladadas a Sudamérica y luego “suben” por el continente hasta Estados Unidos.

Todo ello frente a la aparente permisividad de las autoridades mexicanas. “La ruta de la migración irregular en México no ocurre sin vigilancia del Estado. Hay agentes migratorios en cada esquina, así que es muy difícil para las personas transitar desde el sur hasta el norte”, recuerda Aranda. En el mismo tono, Valdéz insiste en que, “ante la ausencia de una política migratoria horizontal y transversal, la situación va a seguir así haya mayor vigilancia: con tecnología o muros, las personas van a seguir migrando”.

NOTA RELACIONADA.

Ciudad de México ya no es santuario para migrantes, dice MSF

DW, 14/08/2024.

Los migrantes ya no tienen albergues seguros, acceso a la salud y sufren todo tipo de violencia, apuntó el organismo que ayuda a la población migrante en la capital mexicana.

La organización internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) dijo este martes (13.08.2024) que Ciudad de México dejó de ser “un santuario para los migrantes”, debido a la escasez de albergues seguros, el complejo acceso a trámites migratorios y al aumento de la vulnerabilidad para esta población.

La organización, que trabaja con los migrantes en la capital de México desde agosto de 2021, comprobó que esta situación “está llegando a un límite inédito con un impacto directo en la salud y seguridad a esta población en la ciudad”.

“Definitivamente ya no es posible hablar de Ciudad de México como un santuario para la población migrante”, afirmó Israel Reséndiz, gestor de actividades móviles de MSF en un comunicado.

Recordó que hasta hace un tiempo las personas migrantes que llegaban a la capital mexicana “encontraban un respiro a las hostilidades del viaje” por cuenta de la oferta de servicios de salud, albergue y acceso a trámites migratorios que escasean en otras partes del país.

Situación ha empeorado en los últimos meses

“Hoy en día es todo lo contrario; se ven obligados a vivir en la calle, con grandes limitaciones de acceso a atención sanitaria y sin posibilidades de recibir protección”, lamentó Reséndiz.

El representante señaló que desde hace varios meses, en MSF denunciaron la escasez de espacios de albergue seguros y dignos para la población migrante en la Ciudad de México.

Sin embargo, “esta situación no ha hecho más que empeorar en los últimos meses” y dijo que su equipo ha observado cómo los intentos de las autoridades para atender la situación han resultado fallidos, como en el caso de la apertura y cierre intempestivo del albergue de Tláhuac en 2023 y de la Casa del migrante en 2024.

“Al mismo tiempo, los albergues de la sociedad civil se encuentran saturados y con grandes retos para su funcionamiento”, expuso.

Violencia sexual, extorsiones y secuestros

Además, acusó que justo la falta de espacios y cierres mencionados se ha traducido en un alza en casos de violencia sexual, cobro de suelo, extorsión, secuestro que victimizan a la población migrante.

Apuntó que entre enero y junio de 2024 la ONG “detectó 83 casos de violencia sexual, lo cual configura un alza de 80,43 % en comparación con el mismo periodo del año anterior, donde registramos 46 casos”.

A ello se le sumó el hecho de que la violencia en cualquiera de sus formas es, con distancia, el principal motivo de consulta para las personas migrantes que se acercan a las clínicas móviles de MSF ya que el 69 % de las personas buscan atención por este motivo.

MSF dijo que tan solo en julio, ante la negligencia institucional del Gobierno de la capital mexicana para atender las necesidades de la población en movimiento, “han proliferado o aumentado la cantidad de personas en los campamentos informales” en sitios como la Plaza de La Soledad, colonia (barrio) La Merced, y El Camellón y Las vías, cerca de la Terminal de Autobuses del Norte.

“En cada uno de estos tres lugares se aglutinan aproximadamente entre 800 y 1.200 personas, entre las que se encuentra una gran proporción de menores de edad, mujeres embarazadas y personas con necesidades en salud, que son más vulnerables a los efectos negativos de vivir bajo estas pésimas condiciones de hábitat y seguridad”, señaló Reséndiz.

Ante este panorama, la ONG hizo un llamado enérgico para que las autoridades de la Ciudad de México respondan adecuadamente a las necesidades de la población migrante en la ciudad.

jc (efe, La Jornada).