En el marco del Jueves Santo, el Arzobispo de Durango Faustino Armendáriz Jiménez recordó la última cena de Jesús y realizó en lavatorio de pies, en una jornada que conmemora la institución de la eucaristía.
En la catedral de Durango, se recordó la última cena de Jesús con los 12 apóstoles y el lavatorio de pies que realizó el mesías como un ejemplo de servicio de humildad.
“Este es un día de gratitud de toda la iglesia y de cada uno de nosotros, cuando los santos van por la vida realizando obras de bien nunca dejen de nutrirse y alimentarse de Dios, porque la oración encuentra consuelo, porque en adoración escuchan a Dios, dialogan a Dios pero sobre todo ellos los santos y los cristianos que valoran la presencia de Eva de Jesús se alimentan de Cristo en la eucaristía y damos gracias a Dios por que en esta última cena les mandaban los apóstoles “coman y beban, hagan esto en memoria mía”, expresó el Arzobispo.
En su homilía, el arzobispo de Durango subrayó el mandamiento del amor al recordar las palabras de Jesús que dijo amen se unos a otros, como yo los he llamado, al grado de dar la vida por ustedes y de quedarme entre ustedes.
Así, en diferentes templos de la ciudad revivió la celebración en donde se recordó la última cena de Jesús con los 12 apóstoles y con lo cual inicio llamado triduo Pascual, Qué celebra los tres grandes misterios de la redención, como son la pasión, la muerte y resurrección de Jesucristo.