El Congreso del Estado analiza las acciones legales ante los daños ocasionados en su edificio durante la manifestación del 8 de marzo, informó Héctor Herrera Núñez, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política.
El legislador reconoció el derecho a la protesta, pero advirtió sobre excesos que pusieron en riesgo a personas y afectaron el funcionamiento del Congreso. Los daños incluyen afectaciones en el segundo piso, equipos de cómputo, impresoras y áreas de espera, además de la destrucción de archivos de trámite legislativo, iniciativas y minutas.
“El 75 por ciento del personal del Congreso son mujeres, y hoy enfrentan dificultades para su labor debido a los daños. Se quemaron archivos digitales en la Secretaría General, lo que compromete la continuidad de procesos legislativos”, explicó Herrera Núñez.
También destacó que se puso en riesgo la integridad de manifestantes y personal que resguardaba el recinto, incluyendo policías estatales y elementos de protección civil.
El coordinador del Grupo Parlamentario de Morena reiteró el respaldo del Congreso a las manifestaciones pacíficas, pero rechazó actos que deriven en violencia y daños al patrimonio público.