Obispos y Empresarios juntos por Seguridad, Justicia y Paz

Obispos y empresarios promueven la justicia y la inclusión en México

Lograr un México más justo, seguro e inclusivo y el fortalecimiento del diálogo regional, fueron los objetivos del encuentro entre la Iglesia y el sector empresarial mexicano.

Ariana Pernía Paolini – Ciudad del Vaticano. (Vatican News, 111024).

 

Finalizó el Encuentro Nacional de Obispos y Empresarios de México 2024 este 9 de octubre, con el objetivo de promover una nación más justa, segura e inclusiva, se desarrolló el evento que congregó a 120 personas en la sede de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).

 

Durante el encuentro que duró tres días, los asistentes participaron en mesas de análisis, donde presentaron y escucharon propuestas y resultados de las acciones realizadas en distintas comunidades, “con miras a un desarrollo inclusivo para todos sus habitantes”; dentro de los temas destacados, se encontró “la urgencia de establecer condiciones de seguridad y justicia como uno de los mayores retos que enfrenta el país”.

 

Frente al desafío propuesto, la CEM, mediante un comunicado de prensa, expresó que, para afrontarlo, convoca “a todos a partir de la Agenda Nacional de Paz”, instrumento que se gestó a través de mil Conversatorios por la Paz y 50 Foros de Justicia y Seguridad y se presentó tras el Diálogo Nacional por la Paz en Puebla, México, a promover un cambio en la conciencia colectiva en pro de reafirmar la fraternidad, el valor de la vida y la dignidad humana.

 

“Encuentro Nacional de Obispos con los Empresarios de México. Reflexionando por México: Juntos por la Seguridad, la Justicia y la Paz” es el lema que identificó al evento de este año, donde “se enfatizó la importancia de una visión integral del desarrollo humano como base para alcanzar un progreso sostenible”, tema abordado desde una perspectiva teológica del trabajo y la empresa como medios propicios para proporcionar bienestar familiar y social.

 

Así mismo, durante el evento se enfatizó la importancia de crear espacios de convivencia en promoción de la participación activa y significativa en los entornos de trabajo; cabe destacar, que no se dejó de lado la situación social, económica y política de México, la cual fue sometida a un análisis profundo que confluyó en un llamado a la promoción del perdón, la reconciliación y la construcción de espacios “sólidos de convivencia que contrarresten el avance del odio y promuevan una visión de realismo con esperanza”.

 

Semáforo de Desarrollo Inclusivo

Un instrumento que se implementará en las diversas comunidades y parroquias de la nación mexicana se presentó en el evento, se denominó “Semáforo de Desarrollo Inclusivo” a la herramienta de diagnóstico que permitirá “identificar de manera local las prioridades de cada comunidad en términos de paz y combate a la pobreza multifactorial”.

 

Según la CEM, el semáforo permite evaluar las condiciones a nivel parroquial y territorial, a fin de determinar las áreas de acción “con base en indicadores que clasifican el desempeño en tres categorías: verde, para variables con resultados satisfactorios; amarillo, para aspectos que requieren mejora, y rojo, para áreas en situación crítica”.

 

De este modo, los resultados que se obtuvieron en los proyectos pilotos, realizados en Mérida, Guadalajara, Chihuahua, Puebla y Celaya, fueron introducidos al público y se demostró que la metodología del instrumento sistematizar la información de manera comprensible y facilita así su acceso a las personas involucradas.

 

La CEM reiteró que el objetivo fundamental del Semáforo de Desarrollo Inclusivo es que “que las comunidades sean protagonistas de su propio desarrollo al entender y apropiarse de los resultados del diagnóstico en el que participaron activamente”.

 

En conclusión, el encuentro planteó la necesidad de que cada persona sea artífice “de su propio progreso y el de su comunidad”, por tanto, se acordó fortalecer el diálogo a nivel regional e implementar de manera sistemática el instrumento de diagnóstico presentado ante los miembros del sector empresarial y de la Iglesia Católica.