La niñez duranguense tiene derecho a recibir atención médica integral, y el HMN 460 es la esperanza de miles de familias, mejorando la calidad de vida de los más pequeños.
Ossiel Erik Vargas, subdirector clínico del HMN, conoce de cerca las necesidades médicas de los pequeños y sus familias. Destacó que esta renovación total de instalaciones es un logro de Toño Ochoa, permitiendo ofrecer servicios que antes no existían.
“Vamos a contar con áreas, espacios y, sobre todo, cuidados que antes no teníamos. Se está dando un lugar muy importante a la salud de las niñas y niños, especialmente a la salud mental”, afirmó, refiriéndose a la inclusión de especialidades como la paidopsiquiatría en el HMN 460.
En la zona oriente, donde antes no había servicios médicos, el nuevo HMN 460 incrementará significativamente el número de consultas semanales, con un modelo hospitalario único en el país, gestionado por el Gobierno Municipal.