Preserven a niños de las guerras, pide el Papa

El Papa recuerda a los niños rehenes en Gaza y pide que sean devueltos a sus familias

Por Almudena Martínez-Bordiú

ACIPRENSA, 5 de noviembre de 2023.

Tras el rezo del Ángelus de este domingo 5 de noviembre el Papa Francisco volvió a pedir la liberación inmediata de las personas retenidas por el grupo terrorista Hamás en Gaza, especialmente los niños.

A dos días de que se cumpla un mes del estallido de la guerra entre Israel y Hamás, el Santo Padre ha renovado su llamado de alto al fuego y afirmado que no deja de pensar “en la grave situación de Palestina e Israel, donde tantas personas han perdido la vida”.

“Les ruego que paren, en nombre de Dios: ¡cesen el fuego! Espero que se busquen todas las vías para evitar a toda costa un recrudecimiento del conflicto, socorrer a los heridos y hacer llegar la ayuda a la población de Gaza, donde la situación humanitaria es muy grave”.

Más tarde, pidió como en ocasiones anteriores la liberación inmediata de los rehenes en Gaza y lamentó que “entre ellos hay muchos niños” e instó a que sean devueltos con sus familias.

Sí, pensemos en los niños, en todos los niños implicados en esta guerra, como en Ucrania y en otros conflictos: esto está matando su futuro. Recemos para tener la fuerza de decir ‘basta’”, rogó el Pontífice.

El número oficial de rehenes retenidos por Hamás en la Franja de Gaza asciende a 240 personas, entre ellos unos 30 niños. Desde el comienzo del conflicto el 7 de octubre, el Papa Francisco ha pedido en reiteradas ocasiones su liberación inmediata.

A continuación, el Santo Padre mostró su cercanía a los habitantes de Nepal, víctimas de un terremoto que ha dejado al menos 157 muertos.

También oró por los refugiados afganos que han encontrado refugio en Pakistán, “pero que ahora no tienen a dónde ir”.

“Y rezo también por las víctimas de las tormentas y de las inundaciones, en Italia y en otros países”, señaló por último el Pontífice.

NOTA RELACIONADA.

 

El Papa Francisco reafirma que la guerra “lo destruye todo y quita la humanidad”

Por Almudena Martínez-Bordiú

4 de noviembre de 2023 / 10:45 AM

En la tarde de este sábado 4 de noviembre, el Papa Francisco mantuvo un encuentro en el Aula Pablo VI con los miembros del Servicio Internacional para la Renovación Carismática Católica (CHARIS por sus iniciales en inglés), a quienes pidió orar por la paz.

Al comienzo de su discurso, el Santo Padre se refirió a esta institución como “una ‘ventana’ en el vasto y variado mundo de la  Renovación Carismática Católica. Las personas que trabajan allí, tienen la gran oportunidad de  ‘asomarse’ por esta ventana, y mirar más allá”.

“De superar la propia experiencia local, —continuó el Pontífice— y reconocer  la riqueza que el Espíritu Santo suscita en todas partes; en contextos culturales, sociales y eclesiales  muy diferentes del propio”.

El Santo Padre destacó que uno de los objetivos de CHARIS es multiplicar los llamados “seminarios de vida nueva”, los que definió como “momentos de ‘primer  anuncio’, muy kerigmáticos, que ofrecen a las personas la posibilidad de un encuentro con Jesús  vivo, con su Palabra y su Espíritu, con su Iglesia percibida como un ambiente de acogida, como un  lugar de gracia, de reconciliación y de regeneración”.

Asimismo, remarcó que “después de los Seminarios, son indispensables los itinerarios formativos que ayuden a tener viva la gracia recibida, y sostengan un proceso gradual de  crecimiento en la fe, en la vida de oración, en la conducta moral; así como la participación en los  sacramentos y en la acción caritativa y misionera de la Iglesia”.

En esta línea, recordó la importancia de “promover el ejercicio de los carismas no solo en la  Renovación Carismática Católica sino también en toda la Iglesia”. Y subrayó la importancia de “promover” el carisma y no “controlarlo”.

Para el Papa Francisco, “el servicio que  puede prestar CHARIS es precisamente el de promover los carismas, motivando a que se dispongan  en favor de toda la Iglesia. En particular, deberían valorarse siempre los carismas en pro de la  evangelización y de la actividad misionera, sobre todo cuando están dirigidos hacia los que aún no  conocen a Jesucristo”.

En segundo lugar, invitó a “alentar la profundización espiritual y la santidad de las personas que viven la experiencia del bautismo en el Espíritu Santo”.

El Santo Padre explicó que “no debe darse por supuesto que  una vez que se ha recibido este bautismo en el Espíritu, ya se es plenamente cristiano” ya que “el camino de la santidad es siempre progresivo, en la conversión personal y en el don de sí mismo a Cristo y a los demás, y no solo en el ‘bienestar espiritual’ individual”.

Más tarde, advirtió a los presentes que “su tarea no es juzgar quién es un ‘auténtico carismático’ y quién no lo es”, sino “ofrecer apoyo y consejo  a los Pastores, para acompañar a todos los grupos y realidades multiformes que hacen referencia a  la Renovación carismática”.

Afirmó además, que quienes viven una verdadera “renovación” son aquellos que “saben sonreir”.

“Estén siempre vigilantes para no caer en la tentación de los juegos de poder y de influencia, rechazando el deseo de primerear y de mandar. Es bueno dejar espacio a las nuevas generaciones de responsables, para así comprometerse firmemente con la formación de los  jóvenes, de entre los cuales surgirán los futuros líderes”.

Por último, el Papa Francisco pidió un momento de oración por la paz y reiteró que “la guerra destruye también la memoria de los pasos dados en favor de la paz”.

“La guerra destruye todo, quita la humanidad. No dejemos que nos roben esta memoria de la paz”, concluyó.