El Centro Histórico se volvió un caos en las últimas horas en Durango pues los comerciantes han sacado su mercancía a la vía pública, por lo que los peatones son expuestos ante la circulación de los vehículos, según se ha observado en la zona.
Pese a que los comerciantes han tomado la vía pública los inspectores municipales han brillado por su ausencia, mientras que el desorden en la vía pública prosigue sin mayores sobresaltos, por lo que también los agentes de transito han omitido llamar la atención.
Mientras la invasión de las vialidades esta presente los ciudadanos afanosamente buscan hacer sus compras de último momento previo a la cena navideña, en donde según miembros de la iniciativa privada duranguense los precios se han incrementado en un 30 por ciento.