Habitantes de las poblaciones serranas de Durango han disfrutado durante la mañana de este jueves la presencia de los automóviles que participan en la carrera Panamericana.
Los bólidos transitan sobre la carretera libre con destino al paraje conocido como el Espinazo del Diablo, que es una de las zonas en donde la carretera es más sinuosa, pero a la vez cuenta con algunos de los paisajes más reconocidos de toda la ruta.
Durante la tarde de este jueves habrán de arribar a la capital del estado no sin antes haber visitado los parajes serranos, en donde existen habitantes que han salido a observar el paso de los automóviles.