Perla Rodríguez Contreras
Los policías municipales siguen portando sus cámaras de solapa, mismas que son de gran ayuda para resolver quejas en contra de ellos por parte de la ciudadanía, y es que se trata de al menos cuatro quejas cada mes por abuso policial, de acuerdo con lo informado por el titular de la Dirección Municipal de Seguridad Pública (DMSP), Antonio Bracho Marrufo.
La mayoría de las veces estas denuncias ante asuntos internos son porque el ciudadano tiene algunas dudas sobre si la infracción estuvo bien levantada, si era un cajón de discapacidad o línea amarilla; y señaló que los casos de abuso policial han ido a la baja.
Refirió que esas cámaras representan una herramienta más de beneficio para el ciudadano que para el agente policiaco.
“Es una garantía que en dado caso, cuando el ciudadano presente una denuncia formal ante asuntos internos, y que comente que llegó a tener cierto abuso de la autoridad o alguna irregularidad, nosotros pedimos el video al elemento, y en caso que no haya grabado, que no haya prendido su cámara, damos por cierta la versión del ciudadano”.
Cuando esto sucede, dijo, se le cancela la infracción al duranguense y se sanciona al elemento.