Perla Rodríguez Contreras
En medio de la integración del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria en Durango –es decir, aquella en que el padre daña a sus hijos con la intención de impactar también violentamente contra la madre-, la titular del Instituto de Salud Mental del Estado de Durango (ISMED), Soledad Ruíz Canaán, refirió que en siete de cada 10 familias se sufre de violencia intrafamiliar.
“Con evidencia científica sabemos perfectamente que un hijo maltratado, abusado, tiene una reorganización en sus neuronas, en su cerebro, donde va a ser un predictor, desde la parte genética, un individuo violento, adicto, o bien, buscará el suicidio, porque tienen esa predisposición a la depresión, y a los trastornos de ansiedad”.
Ante ello, es necesario que se denuncie y que a la par se atienda la salud mental, pues reiteró se tiene que atender toda necesidad en materia biológica, psicológica, sociocultural, espiritual y medio ambiental.
Ruíz Canaán aseveró que tiene que haber promoción y prevención en el manejo y tratamiento adecuado de las causas, no solamente de la violencia, sino también del suicidio, corrupción, adicciones, violencia social. “Es importante que se fomente una crianza positiva”.