La administración del presidente Jorge Salum del Palacio trabaja constantemente por mejorar la calidad del aire en el municipio, y como una de las estrategias claves para lograrlo es el derribo de las ladrilleras que se encuentran dentro de la mancha urbana.
Con esto en mente, la Dirección Municipal de Medio Ambiente, a través de la Policía Ambiental, y en conjunto con Juzgado Cívico y la Dirección Municipal de Seguridad Pública, lograron el derribo de una ladrillera más, ahora en el Valle del Guadiana.
Con ésta, suman ya 33 obradores derribados en lo que va de esta administración municipal, demostrando así el compromiso que existe a favor del medio ambiente y la salud de los duranguenses.
Francisco Franco Soler, director municipal de Medio Ambiente, comentó que los derribos se han realizado gracias a los esfuerzos de las dependencias involucradas y siempre privilegiando el diálogo con los obrajeros, pues, asegura, no se busca afectar a nadie sino darles distintas alternativas que beneficien a todos.