La importancia de la reflexión histórica de la Iglesia en México
Pbro. Lic. Jesús Treviño Guajardo
Secretario de Relaciones Institucionales de la CEM
La memoria histórica de un pueblo se desarrolla a través de procesos de reconstrucción e interpretación de los eventos que le han dado vida, de tal manera, que dicha memoria no puede ser estática ni monolítica, sino dinámica y abierta a nuevas perspectivas dadas por los nuevos hallazgos.
Tales hallazgos provocan que nuestro pasado esté continuamente tocando el presente, por esto, el discurso histórico está necesariamente comprometido con el análisis de la realidad actual, aportando a la conciencia viva, un criterio ético de veracidad en el ejercicio del reconocimiento de la propia identidad y del propio contexto.
Así como en la vida familiar, las madres y los padres se empeñan en comunicar a sus hijos aquellos acontecimientos que dieron como resultado los lazos que los unen, así, nuestra Iglesia, como madre y maestra, está atenta para comunicar, después de un proceso de reflexión, análisis e interpretación, la sucesión de acontecimientos que han dado como resultado la reunión de las diferentes comunidades eclesiales y las diversas formas en las que éstas han incidido en las sociedades a lo largo del tiempo.
Hoy, la Iglesia en México, a través del departamento de Historia y Arte de la Conferencia del Episcopado Mexicano, quiere hacer una invitación a participar en este Congreso Internacional de Historia, “Cinco Siglos de la Iglesia Católica en México. Reflexiones en torno a la Conquista, Evangelización e Independencia de México (1521-2021)”, para tener presentes aquellos procesos que han dado origen a nuestra sociedad, descubrir nuevas líneas de investigación y reflexionar en torno a ellas. Queremos ofrecer medios para volver a ser conscientes de la gran diversidad que entretejió la historia de nuestra cultura y que sigue formando parte de nuestra vida cotidiana.
Las efemérides de los 500 años de la Conquista de México-Tenochtitlan (13 de agosto), y los 200 años de la Consumación de la Independencia de México (27 septiembre) han inspirado esta iniciativa, por hacer referencia a dos acontecimientos que han implicado procesos fundamentales en la conformación de nuestro pueblo y en los cuales la Iglesia Católica se ha visto implicada.
La puesta por escrito de la historia de la Iglesia en México ha transitado por varias etapas. En la época novohispana se pasó de la justificación de la incursión del pueblo ibérico en tierras mesoamericanas, a la recuperación de la historia de las culturas prehispánicas, la descripción de los procesos de evangelización y la consolidación de la identidad del habitante de estas tierras americanas, en la que la religión era pieza fundamental.
Por otra parte, en la época independiente, se abordaron aspectos tales como: la situación de la Iglesia en torno a los nuevos sistemas de gobierno influenciados tanto por el constitucionalismo como por el liberalismo, la Iglesia y la educación, el catolicismo social, la organización de los fieles en torno a agrupaciones apostólicas y la difusión de la fe a través de la prensa católica.
En la última mitad del siglo XX, teniendo como centro el Concilio Vaticano II, se ha escrito acerca de la necesidad del diálogo en medio de una pluralidad de ideas, la relación entre la fe y la ciencia, la misión pastoral, la Iglesia y su acción en favor de los más necesitados, la incidencia de los medios masivos de comunicación, de la globalización y del acceso a la información en la experiencia religiosa de los pueblos, por citar algunos argumentos.
Así, en esta tercera década del siglo XXI, y con motivo de las efemérides antes mencionadas, queremos seguir promoviendo una reflexión que nos conduzca a dialogar a cerca de nuestras inquietudes contemporáneas, tomando en cuenta la luz que nos ofrece lo que otros han dicho antes y delineando rutas de esperanza para quienes nos sucederán. Queremos contribuir en la comprensión de nuestro presente y en la búsqueda de senderos que inspiren a las nuevas generaciones.