Expuso que la iniciativa de hidrocarburos es en cierta forma una muestra de que el Gobierno Federal está preocupado, porque la ley de Peña Nieto abrió las fronteras, abrió campo a la iniciativa privada y el día de hoy Pemex como tal ha perdido franquicias. Según estadísticas, cuando menos se han perdido el 50% de las mismas en dos años.
Y es que muchos industriales han apostado con sus marcas extranjeras a vender gasolina en otro país, más baratas y de mejor calidad; “creo que ahí es el tema donde espero que el Gobierno Federal no se pierda”, refirió.
Recalcó que como mexicanos se quiere que esta paraestatal no se pierda, que tome fuerza, pero “el problema es la competitividad, el día de hoy tanto industriales como ciudadanos quieren gasolina barata y de buena calidad, y hasta ahora Pemex no está listo para ofertar eso”.
Indicó asimismo que están de acuerdo en que se revisan los contratos que se tuvieron con empresas que se dedican a la importación de gasolinas, y si existe corrupción o situación anómala alguna, que se apliquen los castigos correspondientes.