Autodeificarse, meta de la Anarquía universal

Descomposición sistemática de EUA va al Siglo; en 1934 Inició el rechazo de los creyentes, y crece, con obstáculos.

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Estamos en medio de una guerra espiritual: el Orden contra el desorden.

 

por Paul Brock.

  • ChurchMilitant.com. (Agencia Católica de Noticias, 010321).

Una batalla que comenzó en el mundo espiritual se redujo a lo material después de que el libre albedrío tanto de los ángeles como de los hombres eligieron oponerse a su Creador, y esa batalla todavía se libra hoy.

Esta guerra espiritual se manifiesta en todas las instituciones importantes. Desde la educación, las noticias, el entretenimiento, la política, los tribunales, y cada institución está fuertemente influenciada por la Iglesia, porque “Como va la Iglesia, así va el mundo”.

Estas instituciones, por su naturaleza, juegan un papel muy importante en cualquier sociedad, y cada una tiene un propósito específico. La educación está destinada a enseñar, las noticias a informar, el entretenimiento a entretener, la política al orden, los tribunales a la justicia.

En el ámbito de la educación – que en latín es “educare” que significa capacitar o moldear – específicamente en América, la falsa enseñanza siempre ha sido parte de la institución.

John Dewey, conocido como el padre de la educación estadounidense, firmó el primer manifiesto humanista que niega el relato bíblico de la creación, afirmando que el universo no fue creado.

 

Sobre la educación, la Iglesia enseña que los padres deben velar por la “educación cristiana de sus hijos” y, al hacerlo, “comparten el oficio de santificar”.

 

Hoy en día, la educación adecuada, es decir, enseñar la verdad, está bajo un ataque en toda regla, ya que algunos de los más poderosos dentro de la institución educativa han pedido la prohibición de la educación en el hogar o la educación privada.

 

Millones de personas ven y escuchan esta información errónea todos los días. Pío

 

En el ámbito de los medios de comunicación, que es el plural de la palabra latina “medio”, que significa término medio o intermedio, en Estados Unidos, específicamente las noticias, y particularmente con respecto a las formas más modernas de cable e Internet, la desinformación siempre ha sido integral en esta institución.

Ted Turner, fundador del primer canal de noticias por cable de 24 horas y  mega donante de la industria del aborto, ha llamado a los Pro-vida “idiotas” y “bozos”.

 

Hoy en día, millones de personas ven y escuchan esta información errónea todos los días.

En Internet, Facebook, Instagram y Twitter son algunas de las plataformas de redes sociales más comunes en el mundo y en la actualidad, y muchas personas obtienen sus supuestas noticias de estas fuentes.

Facebook, propietario de Instagram, fue fundado por Mark Zuckerberg y Twitter fue fundado por Jack Dorsey. Las tres plataformas cuentan con más de 4 mil millones de usuarios en todo el mundo.

 

Ambos fundadores prohíben la libertad de expresión en cada una de sus plataformas y, en particular, el discurso que promueve la verdad.

 

La industria del entretenimiento, otra institución que llega prácticamente a todos los hogares de Estados Unidos, parece haber abrazado completamente el mal.

 

Anton LaVey, el fundador de la Iglesia de Satanás, tuvo una gran influencia en la industria del entretenimiento ya moralmente depravada.

En 6114 California St. en San Francisco es donde estaba la sede de LaVey para su Iglesia de Satanás; usó la casa desde 1966 hasta su muerte en 1997.

 

LaVey se asoció con muchas estrellas de Hollywood, incluidas Jayne Mansfield, Marilyn Manson, Sammy Davis Jr. y muchos más.

Solía ​​haber estándares rigurosos sobre lo que producía Hollywood, y la Iglesia Católica también tenía mucho que decir al respecto.

La  Legión Nacional de la Decencia , también conocida como la Legión Católica de la Decencia, fue fundada en 1933 por el  arzobispo John T. McNicholas de Cincinnati para identificar y objetar el contenido inmoral en las películas.

 

El código de producción de Hollywood, que era la guía de la industria para la autocensura de contenido, le dio a la Legión de la Decencia el sello de aprobación, lo que significaba que las películas tenían que ser enviadas a la Legión Católica para su revisión antes de su distribución pública.

La Legión Católica de la Decencia tuvo un gran impacto en la industria del entretenimiento porque si se condenaban ciertas películas, esto significaba que decenas de millones de católicos en ese momento tendrían prohibido ver las películas bajo pena de pecado mortal.

Se pidió a los católicos que firmaran el Compromiso de la Legión de la Decencia, este de 1934 que dice: “Condeno absolutamente esas películas lascivas que, con otras agencias degradantes, están corrompiendo la moral pública y promoviendo una manía sexual en nuestra tierra”.

 

Hoy en día, no existe una Legión de la Decencia, y se deduce que Hollywood promueve todos los males intrínsecos imaginables.

 

En el ámbito de la política, las legislaturas no solo permiten que el mal persista en una nación, sino que también tienen la capacidad de legislar y codificar. Y con los tribunales, como rama de la política, esta institución también posee esa capacidad.

 El fracaso de estas dos instituciones, con los respectivos propósitos de orden y justicia, ha sido probado por el aumento del desorden y la injusticia.

Hoy en día, no existe una Legión de la Decencia, y se deduce que Hollywood promueve todos los males intrínsecos imaginables. Pío

 

Mirando solo los últimos 50 años,  se legalizó la anticoncepción , luego el divorcio sin culpa y luego el aborto. Ahora el llamado matrimonio gay es legal junto con el transgénero.

 

El Catecismo enseña que el Diablo tiene “cierto dominio sobre el hombre” y nuestra ignorancia por el pecado original “da lugar a graves errores en los ámbitos de la educación, la política, la acción social y la moral”.

 

San Juan Bosco nos dice: “¿Quieres burlar al Diablo? Nunca dejes que te pille holgazán. Trabaja, estudia, reza y seguramente vencerás a tu enemigo espiritual”.

por Paul Brock.

  • ChurchMilitant.com.