Las aves de la especie tordos pecho amarillos que anidan en el bulevar Francisco Villa estrenan nuevo hogar, pues debido a la reposición de 200 árboles de más de 5 metros de altura han encontrado un nuevo lugar para descansar.
Debido a la obra del puente Francisco Villa, que en un inicio proyectó retirar hasta 300 árboles que se encuentran en esta área, después se habló de 80, los cuales serían reubicados en otros lugares para la misma zona, en el lugar se colocarán 200 árboles tipo encino de al menos 5 metros de altura.
El compromiso del Gobierno del Estado de Durango fue reponer el arbolado que se retiraría, y en estos días llegaron 200 encinos que serán plantados.
La preocupación de los ecologistas que se oponen a la obra fue que se quitarían los árboles que daban cobijo a las aves en esta área, pues inicialmente se había proyectado eliminar hasta 300 árboles tipo pino que fueron sembrados hace unos 20 años en los camellones de la importante avenida ubicada al norte de la ciudad.