El Secretario General de Gobierno, Adrián Alanís Quiñones, reconoció que existe un repunte de violencia en la entidad, y expuso que “no se puede tapar el sol con un dedo”; además, descartó que se trate del crimen organizado, pero sí dejó ver que a raíz del fenómeno de “Rápidos y Furiosos”, donde desde Estados Unidos se desplegaron armas, pudieron haber llegado muchas a Durango.
Alanís Quiñones indicó que en la mesa de seguridad de este lunes se analizó detenidamente cada uno de los fenómenos violentos que se registraron durante el fin de semana, algunos llamaron más la atención que otros, como el calcinado, que hasta ahora se cree que pudo haber sido accidental.
Ahora bien, existen sucesos como el de la Colonia La Virgen, donde se liaron a balazos después de una discusión por teléfono.
Los motivos de estos sucesos pueden ser diversos, como la violencia social, el consumo de drogas y, muy importante, la proliferación de armas que se ve cada vez más frecuente en Durango.
En este sentido, el secretario señaló que hay toda una investigación, porque en Durango pudieron haber quedado muchas de aquellas armas que se desplegaron desde Estados Unidos hacia México a través del fenómeno que se popularizó como “Rápidos y Furiosos”.
Finalmente, manifestó que se están tomando cartas en el asunto y se están desplegando estrategias para evitar este tipo de violencia.