El Secretario General de Gobierno, Adrián Alanís Quiñones, sostuvo que era imposible aceptar las condiciones de adhesión al INSABI, sobre todo porque debe cuidarse el patrimonio y la infraestructura que se ha creado con esfuerzos por sexenios, más aún porque la Federación pretendía que el Estado se hiciera cargo de los gastos operativos de los inmuebles.
“Lo primero que tiene que hacer un gobernante es defender el patrimonio de su pueblo, en este caso el gobernador del estado, José Rosas Aispuro Torres, ha estado resguardando el patrimonio en materia de salud, que ha sido un gran esfuerzo de muchos duranguenses, donde inclusive las esposas de gobernadores han estado haciendo durante su sexenio rifas, buscando apoyos para hacer centros de cancerología, oncología y una serie de equipos, todo lo que han podido conseguir y no podemos de repente decir que ese patrimonio se va a donar”, subrayó.
Añadió que la resistencia está justificada, ya que se les está exigiendo un documento que haga constar la escrituración y la libertad de gravámenes. Encima de ello, la Federación establece que el mantenimiento debería seguir corriendo por parte del gobierno el Estado, lo que no parece correcto.
Alanís Quiñones consideró que las acciones que tienen que ver con la política pública deben llevarse al diálogo hasta encontrar un punto de equilibrio, lo cual quizá no va a suceder de inmediato.
Finalmente resaltó que el gobernador de Durango está haciendo visitas y verificaciones personales de la operación de los centros y hospitales del sector salud, atendiendo las necesidades de los mismos.