El gobierno de Durango estaría en disposición de firmar un comodato por los inmuebles del sector salud que pasarían a manos del gobierno federal en caso de firmarse el convenio para aplicar en la entidad el esquema del Instituto de salud para el bienestar (Insabi).
El gobernador José Aispuro Torres expresó lo anterior al señalar que el convenio del Insabi implica que las entidades federativas entreguen la infraestructura de salud al gobierno de la República, lo cual en el caso de Durango no se puede hacer porque la legislación vigente en la entidad lo prohíbe.
“Nosotros no podemos donar lo que es propiedad del Gobierno del Estado la Federación si no hay otro esquema que nos lleve, sí yo estoy de acuerdo que se haga una especie de comodato, pero no puede ser en donación”, puntualizó el ejecutivo estatal.
El gobernador Aispuro Torres insistió en que se analiza aún el convenio de adhesión que se tendría que firmar y el cual incluye la cesión de las propiedades tales como el Hospital 450 entre otros, lo cual prohíbe la Ley de Bienes Públicos del Estado.
Agregó que si el adherirse al Insabi garantiza un mejoramiento en la atención de la salud para los duranguenses, se habrá de firmar el convenio correspondiente, lo cual ha hecho del conocimiento del presidente Andrés Manuel López Obrador, así como del Secretario de Salud.
Reiteró que en Durango nos están cobrando cuotas por la atención en sus centros de salud, y agregó estar abierto a atender a todos aquellos que sean derechohabientes del IMSS o del ISSSTE siempre cuando esas instituciones paguen el servicio que se presta.
Independientemente de la firma, los gobiernos estatales deberán contar con recursos que corresponden en base al convenio de coordinación fiscal, expresó el Gobernador quien se mostró abierto a seguir adelante en base a lo que más le convenga al estado.
“En esto no hay cuestiones de carácter político, aquí lo que interesa es la mejoría de la calidad en el servicio de salud para los duranguenses”, concluyó.