El Instituto Municipal de Salud Mental actuamente atiende a 5 jóvenes con trastornos alimenticios, problemas que llevan a suicidios socialmente aplaudidos, refirió Hilda Patricia Meraz Espinoza, Directora de este Instituto.
Meraz citó que desgraciadamente “los trastornos de alimentación son un suicidio socialmente aplaudido”, pues la sociedad naturaliza y socializa estos problemas a tal grado de calificarlo como sano, ideal o bueno para poder tener una vida plena y feliz; sin embargo, aclaró que siempre se tiene que checar hasta dónde se está viendo perjudicada la salud física y mental, pues las personas con este tipo de padecimientos suelen tener cuadros de ansiedad o depresión que los llevan al suicidio.
Dicho lo anterior, refirió que cada año aumentan los casos de trastornos alimenticios, específicamente en anorexia y bulimia; sin embargo, hasta el momento el Instituto Municipal de Salud Mental atiende a 5 personas, jóvenes de entre 17 y 23 años de edad, a quienes se les da pronta atención, pues este tipo de trastornos son muy difíciles de vencer.
Explicó que en estos temas siempre es necesario estar alerta como padre de familia, ya que a veces lo sano se vuelve obsesión y existen suplementos alimenticios que deterioran la salud física y mental, situación que también pasa en adultos, pues hay personas que hacen ejercicio a media noche debido a que pretenden tener o mantener una vida saludable pero, por desgracia, ya se les salió de control la rutina de cuidados.
Para finalizar, puntualizó que aunque la anorexia y la bulimia sean los trastornos más conocidos, no son los únicos, pues de estos se desprenden la bigorexia, que consiste en aquella persona que practica ejercicio en exceso, y la ortorexia, que cita aquella persona que come excesivamente bajo en calorías, así como también hay otro trastorno conocido como “atracones” en donde la persona come demasiado y presenta cuadros de ansiedad, y todos son necesarios de atender con los profesionales.