En la Dirección Municipal de Seguridad Pública aplicará retenes antialcohol en donde se flexibilizará la política de arrestar al conductor que ha consumido alcohol, además de que se dejará de aplicar la sanción económica aquellos que no muestren un alto grado de intoxicación.
Antonio Bracho Marrufo, titular de la dependencia municipal anunció la nueva política a aplicar en los operativos anti alcohol en donde se dará prioridad a recuperar la confianza con la ciudadanía por lo que no se retendrán a los ocupantes de los vehículos ni las unidades, a menos que haya una agresión de por medio contra los agentes.
“No se van a retener a las personas ni a los vehículos a menos que haya resistencia o violencia”, dijo Bracho Marrufo.
La nueva política responde entre otras cosas a la idea existente en la ciudadanía, de que los operativos anti alcohol son recaudatorios, explicó el director.
Aquellas personas que sean detectadas en segundo o tercer grado de ebriedad, se les asignará un taxi, a menos de que en la unidad en la que viajan existe alguna otro persona que se encuentre en condiciones de manejar.
En caso de ser necesario la retención del vehículo, sólo se cobrará lo que viene siendo la pensión de la unidad en el corralón en donde haya sido resguardado el vehículo; asimismo en los operativos antialcohol se convocará a la sociedad en general a participar para atestiguar las acciones emprendidas por la dirección.