Finalmente los enfermos de cáncer tendrán una esperanza con la apertura de la fábrica de pelucas artesanales, la cual tendría un alcance de hasta 50 pelucas por mes y representa prácticamente una medicina emocional para quienes pierden el cabello por los tratamientos de quimioterapia, así lo informó la presidenta del Patronato del Centro de Cancerología, Irasema kondo Padilla.
Durango había tenido un problema porque enviaba el cabello donado para el Estado de Querétaro y allá se fabricaban las pelucas, esto representaba una mayor pérdida de tiempo y también un mayor costo por lo que determinaron capacitar a 16 personas, tres de ellas a su vez se convirtieron en capacitadoras para formar un equipo y comenzar la fábrica de pelucas artesanales. Este viernes les fue entregado el edificio donde funcionarán con esta fábrica, el cual se ubica en la entrada al hospital materno infantil donde antes hubo una farmacia; se planea tener la inauguración para los primeros días de octubre.
A través del trabajo del Patronato se logró adquirir un equipo especializado para la confección de las pelucas; estos artefactos tuvieron un costo de 35 mil pesos; con ello la producción que ellas esperan tener es de 50 pelucas por mes, dependiendo en mucho del número de donantes de cabello y de los insumos que están surtiendo de manera permanente.
La entrevistada expresó que una peluca para una persona con cáncer puede llegar a tener un costo de 6 mil en el mercado. Sin embargo, a través del esfuerzo de manos duranguenses y voluntarias se podrá entregar la peluca en forma gratuita.
Finalmente destacó que las pelucas tienen un gran valor en el tratamiento, ya que se ha comprobado que el autoestima tiene mucho que ver y esto indudablemente es una herramienta aliada tanto para niños como adultos que enfrentan este padecimiento, “no es sólo por estética, es por la salud emocional..”.
Cabe mencionar que a la par del inicio de operaciones de la fábrica, lanzarán una campaña para promover la concientización y la donación de cabello, el cual incluso puede ser teñido y con un mínimo de 7 u 8 cm en trenza.