La Comisión Nacional Forestal perdió el 45% de su plantilla laboral con las modificaciones del actual gobierno federal, además también tiene un presupuesto más modesto, sin embargo se deben encontrar alternativas para suplir y cumplir las actividades de la dependencia, indicó Marcos Daniel Trujano Thomé, delegado de la Conafor.
Si bien, no precisó de cuánto es el presupuesto que disminuyó en relación al presupuesto del año pasado, si hubo un descenso.
Esto aunado a que se perdió hasta el 45% de la plantilla de recurso humano, obliga a implementar estrategias para sacar el mismo trabajo o más, con menor personal y recurso.
Indicó que una de las formas con las que están compensado la baja de presupuesto y el despido de personal, es a través de convenios con los ejidos, a quienes se les dota de financiamiento por “servicios ambientales”, que es una cuota que se le paga a los ejidos para que cuiden sus bosques a cambio de apoyo en prevención y combate a incendios forestales, control de plagas, acciones de conservación, restauración y reforestación de espacios que hayan sido siniestrados por los incendios forestales o plagas.
El recurso que recibe cada ejido es muy variable, depende de la ubicación, del número de hectáreas e incluso de personas que pueden trabajar en él.
“Al final se tiene que hacer sinergia con los círculos de silvicultura se, agricultores y ganaderos para que estos tres actividades convivan, se desarrollen y cuiden el bosque duranguense”, subrayó.